Guadeloupe (Gracias Concacaf!)

Me estoy dando cuenta que llevo casi cinco meses desde que llegue a Guadeloupe y no les había escrito. Y ahora si que no les escribo para que no me extrañen sino para que no me olviden! Y aprovechando que de una día para otro, y gracias a la concacaf, Guadeloupe se ha vuelto conocida para los mexicanos pues me he decidido a escribir unos parrafitos sobre mi vida en esta isla hasta hace unos meses ignorada por algunos (y todavía por todos aquellos que no siguieron la fabulosa Copa de Oro o que se limitaron a ver la Final contra los pinches gringos y no se dieron cuenta que en la semifinal el H. Equipo Mexicano se enfrentó al novato más sin embargo bien colorido Equipo Guadalupense).

Trámites, trámites y más trámites

Pues si, cinco agitados meses para mi y seis para Gavin en esta isla con forma de mariposa. Por mi parte, he tenido que enfrentarme a lo peor de la administración francesa. Y es que Guadeloupe, territorio francés enclavado en el mar Caribe tiene lo peor de ambos lugares. Así que uno tiene que ser MUY paciente con todo lo que tiene que ver con trámites administrativos, pues la complicación de la burocracia francesa aunado a la pasividad caribeña forman una bomba explosiva que le provocan a uno unas ansias tremendas de homicidio. Y es que, como todos saben, soy mexicana. Y cualquier extranjero que vive en Francia durante más de 3 meses necesita un “Permiso de Residencia”, y ojo! no me vayan a salir con que “pero si tú estas casada con un francés!” Porque les informo que esto no te salva de nada e igual tienes que hacer todo el largo trámite. Y la verdad que no quiero entrar mucho en detalles porque nomás de acordarme me regresa el coraje, pero haciendo un breve resumen de todo lo que ha sido este proceso, que por cierto aún no termina, les puedo decir que tuve que salir del país para pedir una visa especial antes de volver a entrar, presentarme más de siete veces en la oficina de migración y esperar más de 3 horas cada vez, pelearnos a grito pelado y casi llegar a los golpes con un inútil (hasta el Gavin se enojó así que imagínense…), tomarme radiografías de los pulmones, etc. etc. etc. (para todos los apasionados de “trámites administrativos” pero sobre todo para  todos los ingenuos que creen en los pasos que las oficinas de migración publican en internet, les sugiero referirse a reseña completa de mi experiencia, en 2 tomos en «Permiso de Residencia».

Actividades en Lupe Island

Y bueno, no vayan a creer que nuestra vida se reduce a puro trámite, aunque si ocupa buena parte de nuestro tiempo también tenemos otras actividades. Por una parte Gavin con este nuevo puesto “regional” se la ha pasado del tingo al tango desde principio de año, entre Panamá, Haití, Martinique, Guyana, República Dominicana, Dominica…a veces hasta se me olvida que tengo marido! Hoy precisamente está en Martinique. Así que cuando el señor toca base aprovechamos para hacer algunas actividades, como caminatas en el bosque (hemos aprendido a seleccionar las rutas, pues la primera que hicimos duro seis horas en lugar de tres!), chapuzones en ríos y cascadas, el otro día fuimos a rapelear entre árboles, estuvo bastante divertido y el Gavin se volvió adicto. A veces jugamos tenis pues tenemos un club justo enfrente de la casa, aquí la gente es súper deportista (basta ver el periódico para darse cuenta, pues la sección deportiva abarca más de la mitad de las páginas!), les encantan TODOS los deportes, pero sobre todo el ciclismo y el tenis.

También claro, vamos a las playas, que están tan bonitas, mar azul turquesa y arena blanca, pero a diferencia de Grenada aquí la mayoría de las playas están a reventar, sobre todo de franceses blancos que vienen de la “metrópolis” (así les dicen a los que vienen de Francia, pues no se les olvide que también los guadalupeños, así como los ven de bronceados y hablando criollo, son franceses por todas las de la ley), también hay muchos jubilados que se vienen 6 meses del año aquí, durante el invierno en Francia.

Gavin y yo vivimos en la ciudad de Le Gosier, que en español se traduciría en EL PESCUEZO! Nuestra colonia se llama Bas-du-Fort, porque se encuentra en las laderas de un fuerte. Vivimos en un departamento de 3 recámaras, en un tercer piso. Hasta principios de junio compartíamos el departamento con otros colegas de Gavin de la Cruz Roja, pero ahora estamos solos. Una de las recámaras la hice “mi oficina”, y la otra pues es para los invitados! Que nunca faltan por cierto. Seguido tenemos gente de la Cruz Roja que vienen, a mi me encanta recibir gente, pues la mayoría de las veces son personas muy interesantes. La recámara de invitados también está siempre lista para los amigos y familiares que se animen a venirnos a visitar, así que ya oyeron! Vivimos a 30 metros de la playa, tenemos un balcón con una vista preciosa al mar, pero por el momento dicha vista espectacular se encuentra perturbada por cinco enormes grúas, ya que están construyendo un complejo habitacional justo enfrente así que entre las grúas y el ruido de la construcción pues de repente no podemos gozar tanto del balcón, nomás en las noches, pero ya no se ve el mar.

Ñiles Guadalupeños

Por cierto que aquí los albañiles son bien pipiris nice. Resulta que todos llegan en la mañana en carro… y no crean que en datsunsitas, tsurus o pickupcitas eh! Nel, llegan en Peugot, en Citrôen, en Renault, y a veces hasta en Honda los méndigos. Y no crean que en rite, o en carro sardina, noo, cada uno en su carro… se bajan, se ponen overol y casco, se ponen a chambear, a las 12 que les da hambre se van a su carro, abre la cajuela, sacan su tupper wear y su chesco de la hielera, comen agusto, siguen trabajando un ratito y listo, a la casa…Aquí los albañiles, como la mayoría de la gente, nada más trabajan 35 horas por semana, y nomás de lunes a viernes…pobrecitos. Ah eso sí, a diferencia de Francia, aquí los ñiles son igual de nacos que en México, y te chiflan y te gritan, pero en lugar de decirte “güerita” te dicen “mi bebé”.

Pero lo que más me gusta de Guadeloupe son mis amigas. Y es que resulta que encontré a dos mexicanas! Azeret y Cecilia. Ambas casadas con franceses, así que nos consolamos. Lo más chistoso es que Azeret también viene de Guadalajara y tenemos la misma edad. La verdad que me siento muy suertuda de haberlas encontrado porque hacemos buen equipo y son muy buena onda las dos y pues siempre es un aliviane tener con quien hablar español además!

También en Guadeloupe he vuelto a bucear, que no cabe duda es algo que me encanta. Aquí hay muchos lugares en donde hacerlo y sobre todo hay una reserva que se llama “reserva Cousteau” pues ahí filmó un documental el biólogo Jacques Cousteau, así que es un arrecife de coral bastante impresionante. Lo malo es que seguido está a reventar, así que estás buceando con 20 personas más y además tienes a un barco de fondo de vidrio arriba de ti, con cientos de turistas tomando fotos.

También me puse a pintar, el Gavin llegó un día con un regalo: pinturas, pinceles y lienzos, y me dijo “pa que te entretengas”, así que no me quedó de otra que ponerme a disque a pintar. La verdad siento que soy malísima, pero lo importante es que me entretiene muchísimo y sobre todo que puedo decorar las paredes blancas del depa.

Las contradicciones en la seguridad

Guadeloupe es 4 veces más grande que Grenada, pero 17 veces más chica que Guadalajara, así que aquí sí puedes ir a lugares sin necesariamente encontrarte a alguien conocido (no como en Grenada que cada vez que nos quisimos dar una escapada al otro lado de la isla nos encontramos a alguien conocido). Sin embargo, aquí también puedes ir en tu bici y escuchar que alguien grita tu nombre, volteas y resulta que es el cartero que te alcanza en su moto (aquí los carteros andan en moto, no en bici) y te dice que si a donde vas, que si te vas a tardar mucho porque al rato te va a traer un paquete. Cuando me pasó esto casi casi me salía lo tapatía y le preguntaba: Como sabes mi nombre? Hasta que me acorde que era el cartero… Y bueno, hablando de carteros, si hay algo que siempre me ha impresionado en Francia es precisamente el servicio postal…Y es que todo el mundo manda TODO por correo, y cuando hablo de TODO es de veras TODO, hasta cheques!!

Por ejemplo, Guadeloupe nos recibió de una manera no muy cordial. Antes de que yo llegara robaron el departamento en uno de esos días en que Gavin estaba de viaje. Lo vaciaron, se llevaron tele, microondas, computadoras, impresoras, maletas… todo pues. Lo bueno es que el depa estaba asegurado, así que la compañía de seguros pagó y adivinen como hizo el reembolso… Pues mandó un cheque, por correo! Así que cuando abrí el buzón que me encuentro con un sobre con un cheque de 5,000 euros! Lo bueno es que aquí no se pueden endosar, porque si fuera como en México pues todos quisiéramos ser carteros, empezando por mí.

Después, ya estando yo aquí, se robaron mi bici de dos días de estrenada… y eso que estaba amarrada con 2 candados y justo debajo de las escaleras de nuestro súper edificio dizque muy seguro con reja automática y toda la cosa. Fue bastante triste, tuve que ir a la comisaría a levantar un acta, toda una experiencia otra vez, sobre todo porque tuve que esperar dos horas, oyendo a una policía hablando por teléfono de puro chisme con una amiga, y esperar a que la otra policía terminara de chatear para que me recibiera. Al final, mi bici nunca apareció (no como en Grenada que sí aparecen las cosas robadas y hasta te las llevan a tu casa)…. Así que tuvimos que comprar otra, pero igualita a la de antes.

Bici vs Bocho

Y ustedes dirán, y ahora esa loca ahora porque tanta bici? Pues porque es mi único medio de transporte! Y es que resulta que los franceses no reconocen el permiso de manejar mexicano, así que yo no tengo derecho de manejar en Francia si no paso el examen francés. Lo peor de todo es que por ejemplo reconocen el permiso de Ruanda pero no el de México! (porqué será?)… Total de que después de 10 años de manejar pues me tuve que volver a poner a estudiar el código de tránsito… y es que en Francia no se andan con juegos, no es como en Guadalajara que el examen escrito son como 20 preguntas, la primera vez que lo pasé, me lo revisaron ahí mismo y me dicen: ah mi chava, que crees, tienes estas 10 mal… corrígelas y me lo traes otra vez… dizque las corregí y regreso y me dice: ah… todavía tienes 5 mal (y eso que era de opción múltiple y con 4 opciones! O sea que ya había quemado 2 de 4!). Al final terminé corrigiéndolas y creo que todavía me quedaron 3 mal pero pasé de panzazo. Bueno, total de que en Francia no es así. Aquí primero te tienes que inscribir a una escuela de manejo OBLIGATORIO, pagarles 700 euros ($10,200 pesos), hacer 20 horas de manejo practicas con la auto-escuela, estudiar dos libros sobre el código de tránsito, presentar una solicitud para hacer el examen nacional, esperar dos meses, pagar otros 300 euros ($4,400 pesos) para el examen. Y si no pasas examen a empezar de nuevo. La hermana de Gavin ha presentado 3 veces el examen y nunca lo ha pasado! Gavin lo pasó a la segunda o a la tercera también (dizque no se acuerda… pero pa mi que fue a la tercera….) Así que mientras son peras o son manzanas yo ando muy feliz en mi bici…Eso sí, sudo a chorros, pero el lado bueno es que a veces hasta voy más rápido que los carros porque aquí, como todas las islas del Caribe que he visto, siempre hay un trafical. También a veces siento que me atropellan, así que si algo me pasa, les digo de una vez quien fue: o fue una mujer o fue una moto, una de dos. Y no es que sea misógina pero de plano a veces las mujeres al volante no tienen ningún respeto por los ciclistas, será que nunca se han subido a una? Ah que mamey… hasta yo me caí gorda.

A Grenada pero de vacaciones!

Gavin y yo regresamos a Grenada en marzo, pero esta vez de vacaciones y para asistir a una boda. Fue bastante emocionante regresar y volver a ver a los cuates y sobre todo ver a Grenada con ojos de turistas, la verdad que nos gustó mucho. La boda fue todo un evento. Para empezar éramos los únicos extranjeros, y blancos, entre más de cien invitados. Como en todos los países, sin ser México la excepción, las bodas son siempre un reflejo de la sociedad y sobre todo de cierto status social. En este caso la recepción fue en el restaurante más caro y chic de Grenada, sin embargo los invitados grenadinos no apreciaron la comida (se burlaban del soufflé de pescado diciendo “esto es pescado?! esto no es pescado?!, acostumbrados claro a las parrilladas en la playa) y mejor querían pedir el menú infantil que incluía papas a la francesa. Otra cosa que me llamó la atención es que los invitados que no se terminaban su plato o simplemente querían llevarle comida a sus hijos o familiares pues lo pedían para llevar, así que todos salían con sus platos desechables de la boda. Otra cosa bastante chistosa fue la cuestión del pastel. En Grenada siempre hay dos pasteles, el típico, que es un pastel negro, hecho con muchas frutas y pasas y ron, pero como es bastante pesado desde el principio te lo ponen en la mesa, partido en porciones individuales y en cajitas de cartón para que te lo lleves a tu casa. Además de ese está el pastel para la foto y el que parten los novios, que es claro de varios pisos, y con cascada y toda la cosa. Pero lo mejor/peor de todo es que la fiesta se terminó en cuanto se terminó la comida, o sea tempranísimo! En cuanto se acabaron el postre toda la gente se levantó y se fue, que sebos gritaba yo!

En este mismo viaje también pasamos dos días en la isla de Santa Lucía. Este lugar es 100% recomendable, y no sólo lo digo yo, pero también mi amiga Oprah Winfrey, quien dice que Sta. Lucía es uno de los 10 lugares más espectaculares del mundo.

La France en mayo

En mayo Gavin y yo estuvimos diez días en Francia. Fuimos sobre todo a festejar los 60 años de la mamá de Gavin, que tuvo la súper idea de organizar una fiesta. La organización consistió por una parte, en invitar a 20 amigos y por otra parte, delegarles a su esposo, hijos y nuera la preparación de la fiesta. Y como me tocó preparar un platillo típico mexicano pues que preparo un súper arroz rojo con chícharos y toda la cosa!

La verdad fue muy padre estar toda la familia White reunida en casa de mis suegros, por primera vez todos al mismo tiempo. Nos la pasamos muy agusto, comiendo mucho, jugando petanca, viendo películas…

Mucha vacación, pero y de chamba que?

En lo que se refiere a trabajo, yo tenía la idea de encontrar un trabajo estable en Guadeloupe. Primero pensé que por ser Francia pues iba a ser más fácil para mí. Pero bueno, la verdad es que ha sido súper complicado, y hasta el día de hoy no he encontrado nada. Los primeros tres meses era porque no tenía permiso de trabajo, ahora ya tengo pero resulta que estoy sobre-diplomada para la mayoría de los puestos, pero si quiero ser secretaria pues necesito un diploma especial de secretaria! Así que es un poco el colmo. He pasado algunas entrevistas de trabajo que también han sido toda una aventura y hasta cierto punto traumatizantes. En la última me hicieron exámenes de personalidad y de aptitud comercial. No se si conocen este tipo de exámenes pero de plano yo salí de ahí sintiéndome una mierda. Y es que cuando te preguntan: “Te hace desdichada ver a un pájaro con las alas rotas”? Y contestas NO, porque piensas: “bueno, si me daría lástima, pero ps, mejor con alas rotas que muerto no? Además yo tenía un perico que les cortábamos las alas y ps no parecía que fuera tan infeliz…Además bueno, ponle que me da lástima, me pone triste, pero de ahí a hacerme desdichado ps no es para tanto no…” Y luego sales del examen y te sientes la persona más inhumana del mundo y piensas que a la mejor debiste de haber contestado SI para que tu futuro patrón no piense que eres una persona fría y calculadora… Bueno, total de que estos pinches exámenes me quitaron el sueño durante más de dos noches y seguramente tengo una personalidad cuestionable y cero aptitud comercial pues de plano no me contrataron.

Otra misión Cruz Roja

Así que ante esta falta de oportunidad laboral en Guadeloupe no me quedó de otra que aceptar otra misión Cruz Roja. Esta vez fue para la Cruz Roja Internacional, y trabaje directamente para una oficina regional que se encuentra en Puerto España (Trinidad & Tobago). La misión consistía en escribir nuevamente un proyecto y presentarlo a la Unión Europea para su financiamiento. Tenía que ser un proyecto sobre Preparación de Catástrofes en Bahamas, Surinam y Trinidad & Tobago. Al final fue un proyecto de más de 700,000 euros.

Mi misión empezó con un viaje a Guayaquil, Ecuador, en donde se llevó a cabo la reunión Inter Americana de la Cruz Roja. En esta reunión, que se hace cada cuatro años están los representantes de TODAS las Cruz Rojas de América y el Caribe. En total había más de 400 participantes. La organización era impresionante, yo me sentía realmente como en Naciones Unidas! Las conferencias se hicieron en diferentes salas del hotel Hilton de Guayaquil, con traductores simultáneos en inglés y en español (nada de portugués para los brasileños ni de holandés para los surinameses, ni francés para los haitianos).  El Presidente de Ecuador, Rafael Correa, estuvo en la apertura del evento. Yo no lo conocía, no sé si ustedes lo conozcan, pero les puedo decir que causó sensación, para empezar es un doctor en Economía, ha de tener como 40 años y está muuuuy guapo, casi como galán de telenovela. Además empezó su discurso con una frase del tipo “…provocado por las políticas neoliberales…”  y terminó con un “Hasta la victoria siempre!” Que más les puedo decir? 100% mi tipo de hombre!

Pero en medio de todo este glamour y para que no se nos olvidara que somos LA CRUZ ROJA también invitaron a un grupo de indígenas ecuatorianos que de hecho son muy parecidos a los bolivianos, con sombreritos tipo Charles Chaplin. Llamaban mucho la atención primero por los sombreritos, pero también por su tamaño, ya que ninguno pasaba del metro veinte. Pusieron a algunos de estos indígenas a ser maestros de ceremonia de la apertura, y para mí realmente fue bastante interesante ver cómo apenas hablaban español correctamente, pero frente al micrófono le daban una entonación a sus palabras como si fueran políticos en campaña muy a la latinoamericana, ustedes saben, del tipo: “señooores, señooooras, nos sentiiiimos muy honraaaaados hoooooy, de participaaaaaar…”

Bueno, pues total de que estuve dos días en Guayaquil y adivinen que vi….pues NADA! Todo el día en conferencias y citas de trabajo, entrevistando a las Cruz Rojas de los 3 países para el proyecto, y de plano las únicas fotos que tomé fueron desde el taxi que me llevaba del hotel al aeropuerto (…obviamente todas movidas…) Así que me tardé 2 días para llegar a Guayaquil, pues tuve que volar vía Miami y trasnochar ahí, 2 días en Guayaquil y dos días de regreso hasta Puerto España… Por cierto que en mi trasnochada en Miami tuve nuevamente la oportunidad de percatarme de la riqueza cultural de Estados Unidos. En el hotel, viendo la tele, en todos los canales de noticias sólo se hablaba de tres temas, repetidamente: 1. Intento de atentado terrorista en aeropuerto de NY por trinitarios y guyaneses (obviamente tenían que explicar cada vez que Trinidad & Tobago y Guyana son dos países, y enseñar un mapa para mostrar donde se encuentran, y sobre todo hacer hincapié en que están cerca de Venezuela…); 2. París Hilton va a la cárcel; 3. Joven rompe récord y se come 59 hot dogs. No cabe duda que estas son los eventos más importantes de los que uno tiene que estar enterado…

Después de Guayaquil estuve más de dos semanas en Puerto España. Se podría decir que Trinidad & Tobago es la isla más rica y más industrializada del Caribe, pues tienen petróleo. Barbados sería la segunda, pero gracias al turismo. La capital, Puerto España es como si estuvieras en el DF, muchísimo tráfico, fábricas y zonas industriales, centros comerciales enormes, edificios,… La verdad que no salí mucho, pues me la pasaba en la oficina o en la casa de mi jefe trabajando y escribiendo el famoso proyecto.

También estuve cuatro días en Surinam. Me quedé en el mismo guest house que el año pasado, justo enfrente de las oficinas de la Cruz Roja y fue bastante agradable que le dueña me reconociera y fuera como siempre tan amable conmigo. Surinam es un lugar que no deja de impresionarme. Y es que creo que nunca he visto tanto multiculturalismo en un lugar tan pequeño. Por ejemplo, en un solo día comí en un restaurant javanés (pues los holandeses trajeron a muchos esclavos de Indonesia a Surinam, así que hay una gran comunidad y sobre todo mucho restaurante); de ahí me fui a un café Internet en donde había puro güero (seguramente estudiantes holandeses) y había música de Rebelde!; en la noche, en el guest house me senté a cenar con la dueña, de origen indio, y nos pusimos a ver la tele, estaban pasando la Star Academy directamente desde la India. A la mañana siguiente estoy esperando que pasen por mí y escucho en el radio una canción francesa, del icono de música de los 80s francés: Claude Francois, pero cantada en español, a ritmo de banda (en un país en donde se habla holandés además de 10 otras lenguas indígenas…?!). Y es más, con decirles que hasta mexicanos vi en Surinam! Iba en el carro y en una de esas que veo una carpa de circo muy mexicana, y resulta que era el circo de los Hermanos Suárez! Y también en el avión de regreso que volteo a lado y un chavo con una playera de México, obviamente mexicano que trabaja en una empresa de componentes telefónicos mexicana que exporta a Surinam.

Ahí es cuando uno de veras siente la globalización en carne propia, y personalmente me encanta esa sensación, sobre todo en países como Surinam en donde todos los grupos étnicos (indoneses, chinos, amerindios, maroons o africanos, indios) conviven sin ningún conflicto. Y creo realmente que deberíamos de aprender de esto, porque a estas alturas no nos podemos permitir tener sentimientos racistas hacia nadie: ni hacia los mexicanos en Estados Unidos ni hacia los chinos en México, ni hacia los árabes en Francia, etc. etc. Viva el multiculturalismo! Y bueno, creo que yo personalmente no podría pensar diferente, pues a partir del momento en que yo misma me encuentro viviendo en el extranjero no me queda de otra que ser más abierta y tolerante hacia todas las razas, nacionalidades, colores, religiones …

Para terminar, una filosofeada

Y bueno, esta misión me hizo reflexionar en varias cosas, la primera es como cada país dirige su mirada hacia sus “ídolos”, por ejemplo, los surinameses casi nunca viajan a sus países vecinos (Guyana, Guyana Francesa o Brasil), de hecho casi no hay vuelos y a veces ni carretera, sin embargo la mayoría de la gente viaja muchísimo o tiene familiares en Holanda, y hay un vuelo diario Paramaribo-Amsterdam. Igual pasa con México, los mexicanos somos completamente ignorantes de Guatemala o Belice, sin embargo cuantos miles de personas diariamente intentan cruzar la frontera –de manera legal o ilegal- hacia Estados Unidos? En Guadeloupe es lo mismo, solo hay vuelos cada dos días a la isla vecina de Dominica, que está a menos de 30 kilómetros y que de hecho la veo desde mi ventana, sin embargo, hay dos vuelos diarios a París.

Y bueno, ustedes dirán, esto no es novedad…. Pero lo que me preocupa es cómo ésta misma clasificación la usamos para tener sentimientos discriminatorios. Es decir, en Surinam por ejemplo no es vista de la misma forma un inmigrante holandés que un inmigrante brasileño o guyanés; en Guadeloupe no es lo mismo un inmigrante italiano o libanés que un inmigrante haitiano o dominicano; en México no es lo mismo que nos digan que hay mucho gringo y europeo que se viene a vivir a México a que nos digan que hay mucho chino o guatemalteco que se viene a México…Y esto es a lo que quería llegar, al final todos tienen una cosa en común, son -somos- inmigrantes, entonces por qué categorizar?

 

Otra cosa que estuve reflexionando es sobre este ambiente humanitario, no sólo de la Cruz Roja pero de la mayoría de las ONGs, o de Naciones Unidas, etc. en donde de tanto trabajar y de tanto esforzarte en cuestiones humanitarias terminas siendo inhumano. Y con esto me refiero en que de repente escuchas comentarios del tipo “ojala que este año haya varios desastres pues todo está listo para responder”, o “si no hay un huracán vamos a terminar que cerrar la oficina”, o “tenemos 4 millones de euros que tenemos que gastar en programas de desarrollo así que o haces un proyecto o lo haces”… Pero bueno, como me enseñó Gavin sobre Naciones Unidas, a la mejor no ayuda mucho que exista pero peor sería si no existiera…

 

Y bueno, la última cosa que quiero compartir es que llegué a la conclusión de nunca más decir “Siempre quise…” Y es que resulta que en una semana me encontré diciendo “siempre quise hacer tal o tal cosa” varias veces, hasta que dije, a ver, como chingaos que “siempre quise?” que ya estoy muerta o que? Si siempre quisiste hacerlo pues hazlo! Así que mi nueva filosofía de la vida es hacer lo que siempre quise. Y empecé por hacerme un tatuaje. No está en un lugar visible así que lo más probable es que muchos de ustedes a la mejor nunca lo van a ver, pero lo importante es que yo lo veo, me gusta, y al Gavin también me gusta. Mi siguiente paso es salto en paracaídas en noviembre, pues igual, es algo que siempre quise. Mi otro propósito es presentar (y pasar espero!) el examen para integrar el Servicio Exterior Mexicano, así que seguramente tendré que pasar unos meses, el próximo año o el que sigue en México, pero lo importante es que ya empecé a prepararme, compré libros en la Gandhi que me mandaron por correo y estoy estudiándole…

P.D. Para los que les gustan las fotos:

http://laloren1978.spaces.live.com/

o aquí:

http://community.webshots.com/user/laloren

Acerca de LaLoren

Migrante permanente: 21 años tapatía, 1 lyonesa, 2 parisina, 2 grenadina, 1 guadalupense, 1 chiapaneca, 1.5 chilanga, 1 trinitaria, 0.5 ginebrina, 3.5 panameña, 1.5 libanesa
Esta entrada fue publicada en Donde he vivido, Guadeloupe, Todos mis escritos y etiquetada , , , , , . Guarda el enlace permanente.